viernes, enero 13, 2012

Las autonomías como origen de todo

Muy buenas a todos:

No nos cansaremos de repetir lo mismo. La autonomía financiera de las comunidades autónomas, permitiendo fijar libremente su presupuesto es el verdadero problema del déficit público español. Desde que el Tribunal Constitucional permitió que las CC.AA. actuasen líbremente en cuanto a la fijación de sus gastos (la sentencia sobre la LOFCA fue la muerte de nuestro sistema presupuestario), el despilfarro con los más variados fines, ha hecho que nuestras finanzas hayan saltado por lo aires.

Unas financiando nazionalismo separatista (como Cataluña o Vascongadas). Otras simplemente despilfarrando recursos (Valencia y Murcia) y otras, finalmente, para perpetuarser en el poder (Andalucía y Castilla-La Mancha). En el fondo siempre es lo mismo: las decisiones de gasto no se someten a unos criterios económicos, sino estrictamente políticos. Y a raiz de eso, hemos tenido distintos sistemas de financiación autonómica, hechos a la medida de quienes dan su apoyo en sede parlamentaria (fundamentalmente los catalanes ya que los vascos y su cupo les excluye de estos problemas) o a la medida de nuestras sucursales autonómicas. Los requisitos para la financiación, cualquiera que sirva para justificar el despilfarro: población, superficie, actividad económica, incremento de población, etc...

Lo triste y lamentable es que es cuando no hay recursos suficientes, cuando se recorta de servicios públicos en favor de el oportunismo político, es cuando nos acordamos de reformar esto. Lamentable. Mientras hay pasta, hay embajaditas, grandes premios de F1 y aeropuertos absolutamente inoperantes. Pero cuando no hay suficiente, el Estado central trata de adelgazar todo lo que puede y mientras tanto, frie a impuestos a la clase media. Por el contrario, las CC.AA. siguen a lo suyo: recortando los gastos... en cuestiones que no afectan a sus principales intereses, aún a pesar de que sean los más desfavorecidos o los servicios públicos más esenciales los que se resientan.

Andalucía sigue derrochando, Cataluña cierra salas de urgencias pero mantiene embajadas y... Valencia pide un nuevo sistema de finaciación que le permita cobrar 732 millones de euros más. Algunos despistados, despues de esto y alguna otras noticias, siguen cantando alabanzas al señor Camps y su puntera comunidad valenciana. Que triste. Es triste que el activismo político nos ciegue en la crítica política. Que por no dar argumentos al PRISOE, hayan algunos tenido que callarse los despilfarros de grandes premios de F1, ciudades de las artes y de las ciencias y algunos aeropuertos colocados estratégicamente... para hacer ricos a algunos amigotes.

Sin embargo, y volviendo a mi entrada sobre comunicación gubernamental pepera, no sé como no se aprovechan los estrategas del PP de dar estopa a Cataluña o a los dirigentes del PRISOE por los desmanes encontrados en las comunidades gobernadas por ellos desde hace algunas legislaturas. Con mayoría absoluta y con la reforma constitucional referida al déficit público, muchas cosas se pueden hacer. Sin embargo, aquí aparece Montoro y dice una de esas GILIPOLLECES que nos pone los pelos de punta:


Osea, que cualquiera de esos mamarrachos que braman contra España, que buscan su disgregación desde planteamientos soberanistas, cuando no abiertamente racistas, pueden seguir derrochando, que llegará papá Estado español a enjuagar sus desmanes presupuestarios.

Me quedo simplemente sin palabras. ¿Qué mejor forma de azuzar a electorados dormidos o simplemente pasotas como el catalán, que su comunidad suspenda pagos para votar en masa proyectos políticos no soberanistas? Este tipo de oportunidades no se las ponían ni a Fernando VII. Y mientras tanto, el PP a lo suyo: tecnocracia sin el menor conocimiento de los medios y la manipulación mediática. Así, con cosas como esta, no me extrañaría que en 2015, pudiera ganar un PRISOE en manos de algún cantamañanas. Tiempo al tiempo.



Un saludo a todos


Mortgage