Políticas de incomunicación
Muy buenas a todos:
Tentado estoy desde que se conocieron las medidas del gobierno de Rajoy a lanzarme a una crítica feroz. Como insistí por activa y por pasiva, quería y quiero ver los primeros 100 días de Rajoy y con ellos poder hacerme una idea de lo que nos espera a los españoles.

Lo que me parece indecente, tal y como he comentado previamente en otras entradas, es que el presidente del gobierno no se someta al control de los medios de comunicación. Me da igual que sean Púbico, la SER o el Heraldo de Aragón. Dar una entrevista a EFE es como ir a casa de la abuela a contarle las batallitas.
La democracia tiene esas pequeñas servidumbres, y una de ellas, es que los medios traten (o consigan) meterte los dedos en los ojos. Su obligación como políticos es aguantarse. Y la excusa barata de que el socialismo no lo hace es eso mismo: una excusa. Si de verdad queremos mejorar la calidad democrática de nuestro país, el PP debe de dar ejemplo... o convertirse en un PRISOE de derechas, tan sectario como el original.

El último ejemplo, las subvenciones del ministerio de Asuntos Exteriores, es tan sangrante y tan favorable a una política medianamente inteligente de comunicación que es vergonzoso que los equipos de comunicación del Gobierno no estén atizando a los sucialistas mañana, tarde y noche.

Clarificador de como piensa un socialista y como actua un pepero. Descorazonador para alguien afin a las ideas de regeneración y fortalecimiento democrático de mi Nación.
Un saludo a todos
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