Síntoma de una enfermedad

Muy buenas a todos:

Como es lógico, no podíamos dejar pasar la que para mí ha sido noticia estrella de esta semana. Ayuso entrando en una de las porquerizas de la ultraizquierda: la universidad española.

Enfrentamientos entre simpatizantes y detractores de Ayuso a las puertas de la Complutense 

Nada nuevo bajo el sol. La universidad española nunca fué un espacio de debate, de estudio o de avance social. Desde que llegó la democracia a España, es uno de esos focos de corruptelas y donde la izquierda campa a sus anchas. Cientos de funcionarios y sus correspondientes enchufados que "trabajan" sin control alguno y viviendo de un presupuesto cada vez más grande con la excusa de la "calidad de la educación".

Que en ese charco de lodo y detritus apareciera Ayuso, la némesis de la izquierda, era demasiado. Y de ahí las imagenes, el cerco y el despliegue policial para protegerla. Toda la chusma de izquierdas debió de acudir desde todos los campus para vender esa imagen de oposición del mundo universitario. Afortunadamente, la sectaria Delegada del Gobierno hizo su trabajo correctamente y salvo algún empujón y la tensión habitual, nada digno de reseñar. 

Sin embargo, eso no era la sorpresa que la izquierda tenía preparado para Ayuso.

Elisa María Lozano era la sorpresa. Una niña pija de ultraizquierda que aprovechó su galardón como mejor estudiante de la Facultad de CC. de la Información para en presencia de Ayuso para lanzar toda la morralla argumentativa de la ultraizquierda mediante eslóganes, soflamas y gritos infantiloides tan propios de la izquierda "naif" que tenemos en España. Una de tantas niñas pijas que no ha trabajado en su vida ni sabe lo que es la vida.

He visto dos veces el discurso de la niña y sinceramente no me sorprende. La universidad española es un enorme establo de jóvenes donde se reparten títulos que no reflejan ni el potencial ni el verdadero conocimiento de los alumnos. Ni más ni menos. 

Lo único que sabemos es que esta mermada, porque no es otra cosa vista la calidad de su "pieza de oratoria", ya tiene un sitio como cargo medio/alto en Podemos a falta de que Iglesias decida trinchársela como lider máximo de una organización machista y patriarcal como es Unidas Potemos (nótese la ironía).

Sin embargo, sus gritos, sus comentarios y soflamas no suponen más que un acto más de propaganda que intenta frenar el batacazo que las políticas y los partidos del "progreso" se van a dar en las elecciones de mayo. Porque las encuestas auguran una auténtica hecatombe.

Confiemos en ello.

 

Un cordial saludo