lunes, marzo 08, 2010

Es pura propaganda. ¿Pero es buena?

Muy buenas a todos:

Una de las razones por las que las ideas de izquierdas han calado tan hondo en la sociedad española es por el excelente manejo de las situaciones y los medios de comunicación de la Izquierda sobre la Derecha.

Siempre hay una cámara "amiga" en el resbalón, el comentario inconveniente o el gesto feo de un dirigente de derechas y casi siempre no lo suele haber en donde la izquiera puede tener un problema. Alguno recordará algunos sonoros traspies de dirigentes socialistas, pero si os daís cuenta, siempre son menores y apenas les afectan.

Sin embargo, hay un elemento anómalo últimamente. El proyecto personalista y de cesarismo que es UPyD, de la inefable Rosa Díez, empieza a usar esas mismas estrategias para empezar a aparecer en los medios y poder ser el granito de arena que pueda dejar fuera de combate a la maquinaria electoral sucialista, con el inefable Pepiño al frente.

Energúmenos nacionalistas intentan agredir a Rosa Díez en Barcelona

Uno no entiende que en las actuales facultades españolas, existe una inaceptable tolerancia hacia cualquier organización de izquierda, fundamentalmente extremista y antisistema, que bajo los pechos de cuatro profesores caducos y añorantes de la oposición al franquismo que no hicieron, permitan a sus jóvenes cachorros "expresar" su posición a cualquie forma de autoridad.

Pero cuando el dinero y los espacios públicos están en juego, bromas las justas y que alguien coarte, impida o violente la libertad de expresión de otro solo merece la acción represora de un Estado que debe proteger tanto al político como al melenudo que no le gusta oir nada y que solo piensa en transitar sin pegar golpe en la universidad hasta la llegada de tiempos mejores.



Dicho lo anterior, una pequeña reflexión. ¿Era previsible esta reacción y la repercusión mediática obtenida por Rosa Díez y su camarilla de amiguetes? No tengo la menor duda. Sí. Las últimas noticias que surgen del proyecto UPyD son tristes. Laminaciones, depuraciones al más puro estalinista... pero de repente, aparece siendo agredida por nazionalistas catalanes en la facultad de Ciencias Políticas de la Universidad de Barcelona vuele al primer plano mediático.

¿Lavado de imagen? ¿Aparecer como víctima? ¿Submarino de izquierdas que busca captar votos entre el electorado sucialista moderado? Todo podría ser. Pero frente a cualquier otra consideración, ni es aceptable su intento de agresión, ni la basura izquierdista que infesta la universidad... ni que nos tomen el pelo con lavados de imagen.




Un saludo a todos

P.D.: Me gustaría saber cual fue la opinión de este partido con la peineta de Aznar a casi los mismos indeseables que le abuchearon e injuriaron en Oviedo. Sólo por ver la reacción...


Mortgage