Monarquía y ¿reyezuelos?

La monarquía, como forma de jefatura de estado (frente a la república), es una institución realmente curiosa. Su vigencia desde un punto de vista legal, atenta contra el principio de igualdad de cualquier ciudadano ante la Ley.

Razones históricas, sentimentales, y una mezcla de virtudes y comportamientos cívicos, lealtad al país que dirigen, son actualmente sus únicas bazas para seguir estando en la cúspide del estado. Porque seamos serios: si dependiese la Monarquía del apoyo de personajillos como Ansón y algún que otro catacaldos más, aquí ya habría desaparecido. Algunos dirán que las encuestas la colocan como la institución más respetada. Pero yo respeto mucho más, por ejemplo, a Pepu Hernández que a Rodriguez I el Traidor, y no colocaría al primero como Presidente del Gobierno.

Tras esta declaración de intenciones, quisiera comentar la siguiente noticia, colgada en Periodista Digital:

http://blogs.periodistadigital.com/tizas.php/2007/05/05/harry_camiseta_iraq_irak_espartaco_3456

Me parece acojonante. Y no tanto que los compañeros de armas del príncipe Harry decidan hacerse camisetas en apoyo si no la simple circunstancia de que un príncipe inglés vaya a un avispero como es la zona sur de Irak, y rifle al hombro, se coloque en situaciones de riesgo frente a la chusma de delincuentes, terroristas y demás indeseables que ahora campan a sus anchas por aquel país.

Es toda una muestra de coraje, de compañerismo y de ese ejemplo que convierte a la Monarquía inglesa en fiel reflejo de una sociedad que no se arredra ante nada ni ante nadie, tenga el enemigo turbante, cigarro habano o no.

Y aquí en España, ¿qué tenemos? A un sujeto cuya elección de ropa llena páginas de la prensa rosa (Jaimito de Marichalar), a otro que bordea peligrosamente el tráfico de influencias (Urdangarín y sus empresas de gestión deportiva) y una Princesa de Asturias que ha sido la mejor fuente de rumores de los últimos años para la prensa rosa.

Y no hablemos de los innumerables rumores sobre escarceos "amorosos" de S.M. el Rey. Porque de sus amistades "peligrosas" condenadas por estafa (los Albertos) y por algunas otras cosillas, mejor no hablar. Por supuesto, esta autocensura de TODOS los medios de comunicación sobre la Familia Real y sus posibles informaciones coloca a cada monarquía en su justo lugar. Y da igual que sea "El País" que "El Mundo". Todos calladitos.

GOD SAVE THE QUEEN !!!