viernes, marzo 28, 2014

¿Y qué carajo importa?

Muy buenas a todos:

No deja de sorprenderme hasta qué punto los periodistas y en general la gente que no se define como católico es capaz de opinar, criticar o incluso manifestarse por cosas referidas DIRECTAMENTE a la Iglesia Católica. ¡¡Ojo!! Que la Iglesia, como el Real Madrid, o incluso el Colegio de Abogados es susceptible de ser criticada en su funcionamiento o en cualquier manifestación externa. Pero cuando hablamos de su funcionamiento interno, creo que son sus feligreses, socios o colegiados, los que deben de opinar, no los que estamos fuera.

Y toda esta pequeña introducción se debe al chusco titular de un confidencial perteneciente al periódico Voz Pupili que publica la siguiente noticia:



Y a mí como ATEO (y lo pongo en mayúsculas), ¿qué carajo me importa que sea Rouco, Burillo, Cañizares o el arzobispo castrense el que oficie el funeral? Es como si algún periodista de vía estrecha, y mente aún más, opina sobre el color de la estola del oficiante o sobre la altura de las velas del altar de la Almudena. ¿Es eso un problema de toda la sociedad, o sólamente de los católicos de Madrid? Pues eso. Si no gusta que oficie Rouco que los progres no vayan al funeral. Si se es progre, lo más adecuado es encender el pc y ponerse el videoblog de Gabilondo... y todos tranquilos.

Desde luego, en España no cabe un tonto más.



Un saludo a todos


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