Camino equivocado, mal empezamos.

Muy buenas a todos:

¿Hay que votar a Rajoy porque de verdad es la solución a España o porque no queda más remedio visto el erial que es la clase política?

Esa pregunta es la que me lleva martilleando desde que el bobo Solemne anunció la convocatoria de elecciones generales para el 20-N. ¿Debemos de votarle con los ojos cerrados o con la nariz tapada? O mejor dicho, ¿simplemente debemos de votarle? De momento, lo que va anunciando, fundamentalmente en medidas económicas no es nada nuevo: recorte del gasto público a mansalva.

Pero tampoco nos engañemos: es que no nos queda otra si no queremos quebrar y pasar a ser un protectorado aleman en lo económico. Las soluciones de Rajoy son las de un administrador solvente y competente. Sin embargo, no sé si por táctica política (mal) o por que no las tiene (mucho peor) en España son necesarias una serie de reformas de gran calado, lo que a mí me gusta definir como cirugía de hierro, sobre las cuales, apenas vemos esbozos y comentarios entre líneas.

Recuperación de competencias de las CC.AA. , recorte de gasto en áreas inútiles, fortalecimiento del Estado (que no incrementar sus niveles de gasto), reforzamiento de la Justicia, etc... son algunas áreas donde no sólo hay que entrar con la tijera del recorte de gasto sino tambien con el mazo de construcción para modificar desde un punto de vista legislativo áreas abandonadas por el Estado central y convertidas en zonas de "piratería" autonómica (ejemplo claro: embajadas, teles autonómicas y así hasta el infinito).

El problema, es que hace algunos días, mis alarmas se dispararon cuando yendo a comprar "La Gaceta", me desayuné esta noticia:

Rajoy llevará a Gallardón en la lista de Madrid para después hacerle ministro

Increible. Sólo espero que sea uno de esos rumores que difunde de vez en cuando el cantamañanas del alcalde de Madrid para seguir apareciendo en los medios y seguir postulándose como una figura política dentro del PP. Porque como Rajoy decida premiar a este sucialista disfrazado de democristiano, a este despilfarrador, a este amigo de los enemigos del PP, va a confirmarse que Rajoy o es muy listo... o terriblemente estúpido. ¿Por qué el PP premia al peor administrador de caudales públicos de toda España? ¿Qué hechizo ejerce sobre sus propios compañeros de partido (excluida Aguirre) para que a pesar de dejar en bancarrota el ayuntamiento de Madrid, se le premie con un acta de diputado y... ¡¡un ministerio!!? ¿Estamos locos o qué?

Y mientras tanto, un Aznar encantado de tener a su mujer como futura alcaldesa de Madrid.

Este asunto, de no ser por la crítica situación de nuestro país, es un caso para estudiar atentamente lo mediocre, lamentable, rastrera y poco profesional que es la política en España. En un país serio, Gallardón habría desaparecido de la política hace ya muchos años. Sus traiciones a Aznar allá por el 96 ya le retrataron como lo que es: un sujeto sin principios ni decencia que tan pronto se pone a la vera de Fraga (padrino político), como que financia con algunas decenas de miles de euros a las asociaciones de izquierdas de gays y lesbianas que dan carnets de demócratas. Y ya si encima es amigo de Bono... apaga y vámonos.

Lo dicho: más dudas sobre si votar a Rajoy... o quedarme tranquilamente en mi casa.



Un saludo a todos