Extraña sensación

Muy buenas a todos:

He de confesaros una cosa. No he prestado la menor atención al debate sobre el estado de la nación. Y no por problemas de trabajo o de falta de tiempo. Es que simplemente tengo la sensación de ver escenificada de nuevo y otro año más, la misma pantomima de siempre.

De un lado, Rodríguez I el Traidor. Sin ideas, con mucho humo y con su aparato de agit-prop funcionando a todo trapo. Falsamente conciliador, chulo y en ocasiones (la mayoría) diciendo majaderías que ni él mismo se cree. Las recetas, las de siempre. Impuestos, consenso y el etereo llamamiento a "arrimar el hombro". Patético.

Por el otro Rajoy. Brillante orador aunque falto del nervio y de la mala leche necesaria para hacer de un duelo dialéctico un verdadero calvario al contrario. Pero sobre todo un cobarde. Llevamos dos años con la dicotomía adelanto electoral / moción de censura. Y lo peor de todo es que ni plantea temas que su cálculo electoral le impide acometer. ¿Por qué no sube a al tribuna de oradores e interpela a PNV, CiU y resto de piltrafillas por su colaboricionismo, cuando no su complicidad con el patán que nos gobierna? ¿Y por qué no hace como Rosa Díez y acusa, con motivo del Estatuto de Cataluña, a Rodríguez I el Traidor de lo que es? Por la sencilla razón que afear su conducta es ponerse más difícil, dentro de 18 meses el sillón de la Moncloa con los nazionalistas catalanes. Lamentable.

Lo dicho, ayer, recien vuelto de mi curro, me puse la 2ª película de la saga Bourne. Infinitamente más entretenida que toda esta mierda de políticos sin agallas o sin cerebro (o ambas cosas).


Un saludo a todos