Muy buenas a todos:
Hasta aquí hemos hablado del pésimo resultado del PP en las últimas elecciones. Sin perjuicio de la charlotada de Aguirre, que sabiéndose completamente fuera de la alcaldía anima el periodo postelectoral, pocos son los analistas que han lanzado su mirada al rotundo fracaso que ha cosechado el PRISOE a nivel nacional.
Los decepcionantes resultados de Susana Díaz no auguraban ni de lejos el desplome del PRISOE en estas elecciones, que le transforman de partido de referencia en la izquierda española a simple acompañante de Potemos en la aritmética electoral. De alternativa... a simples comparsas.
Si el PRISOE fuera un partido socialdemócrata europeo, se reuniría y su cúpula elaboraría un análisis riguroso de la situación actual con un diagnóstico: Potemos es su principal enemigo ya que incide directamente sobre su electorado y su ideología. Potemos no aspira a ser un partido de izquierdas, aspira a ser el
ÚNICO PARTIDO DE IZQUIERDAS, que englobe desde la ultraizquierda más descerebrada, hasta la socialdemocracia más o menos respetable. Y con ese diagnóstico, reaccionar y pasar al ataque, tanto a nivel mediático como político.
Sin embargo, el PRISOE es lo que es: una mafia electoral que busca la detentación del poder a costa de cualquier cosa. Y es por ello que cuando han visto la estrella emergente de Pablito & Cía, todo son loas, grandes eslóganes y palabras vacías con una única intención: volver al poder. Acompañados de comunistas bolivarianos, de Jack el Destripador o el mismísimo Lucifer. Lo importante es el PODER.
Sin embargo, puede ser que la misma Susana Díaz, esa sucialista cuyos alrededores ya apestan a corrupción como una cochinera, puede ser el freno a esa bajada de pantalones que el muchachete Sánchez quiere perpetrar con las siglas del PSOE. Porque una cosa es ceder una alcaldía o una comunidad autónoma pequeña o mediana, y otra es que Pablito & Cía accedan al último refugio socialista que es Andalucía.
¿Qué ocurrirá? Pues como en muchos órdenes de la vida, habrá que estar atento... y esperar a las generales. Porque una cosa es una comunidad autónoma quebrada (que son la mayoría ya que el despilfarro está a la orden del día) y otra cosa es el acorazado del BOE... que es donde todos quieren subirse.
Un saludo a todos
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