viernes, octubre 28, 2022

Dos teorías... o tres.

 Muy buenas a todos:

Ayer explotó la famosa negociación para la renovación del CGPJ que Bolaños y González Pons estaban perpetrando entre bambalinas. El órgano de gobierno del Poder Judicial vuelve a quedarse bloqueado por el abandono de la mesa de negociaciones por parte del PP. La causa aparente: las negociaciones del PSOE con ERC para rebajar la pena del delito de sedición, confirmadas por la disléxica que dirige el ministerio de Hacienda.

Como es lógico, el PSOE gimotea con el típico rosario de cliches para tratar de acojonar a Feijóo y atraerse a una opinión pública que pasa olímpicamente de este tema.

Y no debería de pasar olímpicamente del tema porque el control político del poder judicial y sobre todo del Tribunal Constitucional desarma completamente a la Nación española frente a la piara de enemigos que conspiran contra ella, aprovechando la debilidad de Begoño. Pero bueno... es lo que hay.

Sin embargo, se me plantea la duda, ¿por qué en este momento Feijóo sufre un rapto de lucidez política y decide salirse del pasteleo? Hay dos teorías... o quizás tres.

1ª teoría

El PP trataba de forzar al PSOE un reparto igualitario de cromos (importándole una mierda un CGPJ verdaderamente independiente) y viendo que no cuajaba, ha dado un paso atrás.

2ª teoría

Mediáticamente no le salía rentable el pacto con el PSOE y escuchados los barones fuertes del PP (Ayuso y Morenin), el gallego ha echado marcha atrás.

... y 3ª teoría 

Feijóo desde un primer momento ha jugado con el PSOE y ha reventado las negociaciones en el momento más crítico: negociando los presupuestos Begoño con el resto de indeseables miembros de su coalición de gobierno. Indepes catalanes, terroristas y comunistas subiran el tono de sus exigencias y la erosión sucialista será mayor y más visible, por más que Bolaños, la Payasa y cualquier otro miembro de esta m... de gobierno grite llamando al PP lo de siempre: facha, fascista, extrema derecha, etc...

Encaramos el último trimestre de 2022 con la inflación desbocada y signos más que evidentes de recesión... pero eso le importa una mierda a Begoño. Dad por seguro que se arrepentira de ello.


Un cordial saludo


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